Extra Catamarca

Miles de Mujeres se Concentraron Frente al Congreso a Nueve Años de la Primera Marcha

Miles de mujeres se congregaron hoy frente al Congreso Nacional en la novena edición de la marcha Ni Una Menos, un evento que se ha convertido en un símbolo de la lucha contra la violencia de género en Argentina. Bajo la consigna «Con odio y con hambre no hay libertad», la manifestación de este 3 de junio destacó las demandas de justicia por el triple lesbicidio en Barracas y la denuncia por el vaciamiento de programas destinados a prevenir, atender y proteger a mujeres y diversidades en situación de violencia.

Una Marcha Marcada por la Lucha y la Denuncia

Desde temprano, Mónica, junto a casi cien compañeras del Barrio Fátima en Villa Soldati, llegó en transporte público para formar parte de la manifestación. Integrantes de La Poderosa, una organización villera de base, expresaron su lucha contra la violencia económica que enfrentan diariamente. «El Gobierno nos violenta cuando no baja los alimentos para nuestros comedores, para nuestras ollas populares. Pero a nosotras, en los barrios, la violencia económica además muchas veces nos obliga a vivir con los violentos… hasta que pasa un femicidio», comentó Mónica, destacando la invisibilidad de la violencia que sufren en los barrios populares.

Lucía Cavallero, socióloga e integrante de Ni Una Menos, subrayó la crueldad y el odio instaurados como políticas de Estado bajo la gestión de Javier Milei, y la violencia institucional que se ha extendido a lo social, económico y político. «El hambre se está generalizando para las niñeces y para las mujeres, que son las principales afectadas. Y vamos a seguir diciendo que los femicidios crecen mientras se desmantelan las políticas de género», afirmó Cavallero.

Justicia por el Triple Lesbicidio en Barracas

El triple lesbicidio del barrio de Barracas estuvo muy presente en la manifestación. Los nombres de Pamela Cobbas, Roxana Figueroa, Andrea Amarante y Sofía Castro Riglos fueron coreados por los presentes, exigiendo justicia por las tres mujeres prendidas fuego por su orientación sexual. La organización Autoconvocades Lesbianes por Barracas lideró los discursos, denunciando la invisibilidad de las lesbianas en el movimiento feminista y en la sociedad.

Luciana Mina, integrante de Autoconvocades, destacó la falta de precedentes históricos para un ataque de esta magnitud en Argentina. «Nunca había ocurrido algo semejante en nuestro país. Nosotras las lesbianas solemos estar invisibilizadas, aunque somos una parte fundamental del movimiento feminista. Hemos acompañado y nos solidarizamos con todas las luchas», declaró Mina.

La Voz de las Estudiantes Secundarias

A media tarde, una columna de estudiantes secundarios ingresó a la plaza, con adolescentes llenas de glitter y energía. Luna, de 13 años, propuso estrategias para captar la atención de los jóvenes a través de redes sociales como TikTok e Instagram, mientras que sus compañeras Ana y Carmela discutieron la importancia de la participación política desde una edad temprana para evitar la desinformación y fomentar un cambio positivo en la sociedad.

Lectura del Documento Final

La jornada concluyó con la lectura de un documento consensuado por diversas organizaciones feministas. Recordaron a Nora Cortiñas como una «luchadora incansable y madre de todas las batallas», y se plantaron contra la Ley Bases y el DNU, los despidos de trabajadores estatales y la derogación de la moratoria previsional. «Sin moratoria, 9 de cada 10 mujeres no van a poder jubilarse», subrayaron.

El cierre del documento reafirmó el compromiso del movimiento: «Como hace nueve años, cada 3 de junio volvemos a decir ¡NI UNA MENOS! Aquí estaremos hasta que vivamos vidas libres y dignas. ¡Las calles son nuestras!».