Twitter suspende otra cuenta del supremo iraní que amenaza a Trump

Twitter suspendió hoy por segunda vez una cuenta del supremo iraní, el ayatollá Alí Jamenei, esta vez por pedir vengar al general Qasem Soleimani, asesinado en Irak, y por amenazar al expresidente estadounidense Donald Trump, que ordenó el ataque.

Según indicó Twitter en un mensaje publicado en el mismo perfil, la cuenta fue suspendida porque infringía «las reglas» de la red social.

«La venganza es inevitable. El asesino de Soleimani y quien ordenó su muerte deben sufrir la venganza», decía el mensaje, publicado en persa anoche en la cuenta @khamenei_site, que pertenece a una pagina web del ayatollá.

La frase estaba acompañada de un montaje de fotos que muestra a Trump jugando al golf a orillas del mar, mientras la sombra de un avión de combate se proyecta sobre la hierba, reseñó la agencia de noticias AFP..

Soleimani era el jefe de la Fuerza Quds, una unidad de élite de los Guardianes de la Revolución, el ejército ideológico de Irán, y el artífice de la estrategia regional de la República islámica.

Fue asesinado el 3 de enero de 2020 en Bagdad en un ataque de drones estadounidenses ordenado por Trump, que dejó el cargo el miércoles y se retiró a una residencia de Florida con campo de golf.

Jamenei ha repetido en varias ocasiones que la muerte de Soleimani será vengada.

El 1 de enero, el responsable de la Autoridad judicial iraní, Ebrahim Raissi, declaró que los asesinos del emblemático general «no estarán seguros en ningún lugar del mundo».

El 9 de enero, Twitter suspendió un mensaje publicado por una de las cuentas de Jamenei en el que prohibía la importación de vacunas contra el coronavirus fabricadas en Estados Unidos y en el Reino Unido porque consideraba que no se podía confiar en estos países.

El magnate norteamericano Mark Zuckerberg, dueño de Twitter, viene de proceder de la misma forma con Trump por su instigación al ataque al Capitolio, y ayer con la Asamblea Nacional venezolana afín al presidente Nicolás Maduro, en ambos casos argumentando también que infringían las reglas de la empresa informática.

Sin embargo, dejó abierta y habilitada a la de la Asamblea opositora liderada por el autoproclamado mandatario interino, Juan Guaidó.

Varios países, incluso algunos contrarios a la ideología de Trump, condenaron la medida por considerarla injerencista, coercitiva, de corte político y al margen de la libertad de expresión.

Zuckerberg es dueño también de Facebook, Instagram y WhatsApp.