El Gran Premio de Baréin dejó más que un amargo sexto lugar para Max Verstappen, generando un clima de alta tensión en el garaje de Red Bull en la Fórmula 1. Según un informe de Ted Kravitz, reportero de boxes de la cadena Sky Sports, el representante de Verstappen, Raymond Vermeulen, protagonizó un enfrentamiento con Helmut Marko, asesor de la escudería austriaca, luego de una carrera marcada por problemas técnicos y de rendimiento. Kravitz relató que Vermeulen ingresó al box de Red Bull al final de la carrera y, visiblemente molesto, confrontó a Marko antes de retirarse furioso al fondo del garaje. Este incidente refleja la angustia que envuelve al equipo tras un comienzo de temporada complicado para Max Verstappen y su compañero Yuki Tsunoda.
Tras la carrera, Helmut Marko expresó a la prensa la difícil situación que atraviesa el equipo. Reconoció la necesidad de mejorar el rendimiento del coche y los problemas en las paradas en boxes, calificándolos como inaceptables. El asesor de Red Bull destacó los desafíos en el equilibrio, desplazamiento y problemas con los frenos, enfatizando que es un problema tras otro. Por su parte, Max Verstappen no escondió su frustración, lamentando el bajo rendimiento del RB21 y los contratiempos sufridos durante la carrera, incluyendo las dificultades en las paradas en boxes que afectaron su desempeño. Verstappen señaló que pese a los problemas, siguen trabajando para mejorar.
La preocupación en Red Bull escaló a tal punto que se realizó una reunión de urgencia al término del GP de Baréin, con la participación de importantes miembros del equipo como Christian Horner, Pierre Wache, Paul Monaghan y Helmut Marko. Los problemas mecánicos y la destacada actuación de McLaren posicionaron a Verstappen en el tercer lugar del campeonato de pilotos, detrás de Lando Norris y Oscar Piastri. Este escenario aumenta la presión sobre Red Bull para encontrar soluciones rápidas en medio de un panorama incierto en la Fórmula 1.
Debe estar conectado para enviar un comentario.