Rusia e Irán: tensiones tras el bombardeo a instalaciones nucleares

El bombardeo de instalaciones nucleares en Irán ha dejado al país vulnerable, aumentando la atención en la relación con Rusia. A pesar de la cercanía entre ambos países, Moscú parece limitar su ayuda militar a Teherán, lo que genera análisis geopolíticos. Abbas Araghchi, ministro de Asuntos Exteriores iraní, realizó consultas en Moscú sobre posibles respuestas a los ataques. Analistas consideran que Rusia no está en condiciones de ofrecer el mismo nivel de apoyo. La situación de Irán también impacta en la diplomacia rusa, que busca equilibrar su respaldo a Irán con la relación con Estados Unidos. Hasta el momento, la respuesta oficial rusa ha sido moderada, instando a buscar una salida pacífica a la crisis. Aunque el conflicto iraní podría beneficiar modestamente a Rusia desviando la atención y recursos occidentales de Ucrania, la debilidad de Irán socava la influencia de Moscú en la región, poniendo en entredicho el futuro de sus inversiones en el país. La incertidumbre sobre el futuro de los proyectos económicos rusos en Irán es palpable, generando indecisión y cautela por parte de Rusia. En este contexto, la visita del ministro Araghchi a Moscú pone a prueba los límites de la alianza entre Irán y Rusia.