El entrenador español Rafael Guijosa, seleccionador nacional de Irán, logró salir del país persa en pleno agravamiento del conflicto bélico con Israel. Tras permanecer encerrado en un hotel de Teherán, aguarda en Ereván, Armenia, la llegada del avión de la Fuerza Aérea Española que lo repatriará junto a otros ciudadanos evacuados.
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VIVIENDO LA CRISIS
Guijosa, de 56 años y natural de Alcalá de Henares, asumió la dirección técnica del equipo nacional iraní en septiembre de 2024. Durante la tensión entre Israel e Irán, se mantuvo refugiado en su hotel, siguiendo las instrucciones del Ministerio de Asuntos Exteriores y la Embajada de España en Teherán. La escalada del conflicto mantuvo cerrado el espacio aéreo iraní, dificultando cualquier intento de evacuación hasta que se optó por una salida terrestre por Armenia.
INCERTIDUMBRE Y ESPERA
Los días en Teherán estuvieron marcados por la incertidumbre y el temor constante, con ataques cercanos y comunicaciones restringidas. La evacuación, organizada en un convoy de tres autobuses, duró más de 30 horas. Cruzar la frontera fue el tramo más tenso, pero finalmente el grupo llegó a Ereván con la ayuda del personal diplomático español y de la federación iraní. Guijosa reconoció que la principal angustia durante la crisis venía de las dificultades para comunicarse con su familia y la posibilidad de quedar incomunicado. En sus mensajes, pidió prudencia y calma, priorizando siempre estar seguro y transmitir tranquilidad a sus allegados.
TRAYECTORIA Y RECONOCIMIENTO
Guijosa, además de su experiencia como seleccionador de Irán, ha dirigido a la selección de Ruanda y a clubes como Alcobendas y Ademar León. Como jugador, militó en Guadalajara, Juventud Alcalá y Barcelona, y es uno de los nombres más reconocidos del balonmano español.