Mauricio Pochettino, entrenador de la selección de Estados Unidos, se enfrenta a una creciente polémica tras su decisión de no convocar a Christian Pulisic, estrella del equipo, para los últimos compromisos. En conferencia de prensa, Pochettino declaró: ‘No soy un maniquí’, defendiendo su postura y subrayando que los jugadores no pueden imponer condiciones al cuerpo técnico.
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El conflicto surgió cuando Pulisic, jugador del Milan, solicitó ser eximido de participar en la Copa de Oro, pero expresó su deseo de estar presente en los amistosos frente a Turquía y Suiza. Pochettino rechazó esta petición y dejó al futbolista fuera de la convocatoria, generando controversia. Aunque Pulisic afirmó haber aceptado la decisión, también señaló que no la comprendía.
Por su parte, el ex DT del Tottenham y el PSG, explicó su postura y dejó en claro que, como entrenador principal, no se deja manejar por los jugadores. Estos resultados, sumados a un rendimiento que fue calificado como ‘abominable’ por The Washington Post, han intensificado las críticas hacia Pochettino y su gestión.
Sin embargo, el triunfo 5-0 ante Trinidad y Tobago le insufló oxígeno a Pochettino, quien reivindicó su determinación. En medio de la tormenta, Pochettino recibió el respaldo de Landon Donovan y Alexi Lalas, exjugadores y figuras importantes en la selección estadounidense, quienes cuestionaron el compromiso de Pulisic con el equipo nacional y apoyaron la decisión del entrenador.
Por el Grupo D de la Copa de Oro de la Concacaf, Estados Unidos tocará enfrentar a Arabia Saudita y Haití, otras dos oportunidades para Pochettino y su plantel de demostrar su valía sin la jerarquía de Pulisic.