Papa Francisco: cómo es y para qué sirve la malla abdominal que le colocaron

«El Papa está muy bien, despierto y hablando ya con sus colaboradores», explicó el médico que lo operó. Fue intervenido durante tres horas con anestesia general.

El papa Francisco, de 86 años, fue operado este miércoles durante tres horas del abdomen en un hospital de la ciudad de Roma, Italia, en una intervención sin complicaciones y con anestesia general, informó el Vaticano, y por la que suspendió sus audiencias hasta el 18 de junio. Al Pontífice le colocaron una malla abdominal en una operación realizada en el hospital Gemelli de Roma.

«El papa está muy bien, despierto y hablando ya con sus colaboradores. Se le puso una malla protectora en el sector abdominal”, explicó esta tarde Sergio Alfieri, el médico que lo operó en una conferencia de prensa en el hospital Gemelli de Roma, donde fue intervenido quirúrgicamente.

Según precisó, la malla protectora sirve “para terminar de cerrar así la herida provocada con la intervención de 2021 y que ponía en riesgo una complicación a nivel intestinal”.

¿Cómo es la malla que le colocaron al papa Francisco?

Las mallas son prótesis sintéticas que se utilizan en las intervenciones quirúrgicas para el tratamiento de las hernias. Su función es la de reparar un defecto u agujero en la pared abdominal y reforzarla.

Alfieri detalló que la intervención se hizo con anestesia general: “El Santo Padre reaccionó bien tanto a la intervención como a la anestesia”. Y sobre el procedimiento quirúrgico, explicó: “Había varias adherencias como cicatrices a la mitad del intestino que le causaban esa sintomatología. Se eliminaron esas adherencias, y se liberó toda esa parte del intestino que le provocaban estos dolores. Se le hizo una cirugía plástica del aparato abdominal”.

Hay que recordar que el Papa fue operado en julio de 2021 de una diverticulitis por la que le extirparon 33 centímetros de intestino a causa de una “estenosis diverticular sintomática de colon”, que lo tuvo internado 10 días. A inicios de este año, había afirmado en declaraciones a la prensa que la diverticulitis había regresado pero estaba “controlada”.

Se espera una recuperación total en el lapso de 2 a 4 semanas aproximadamente. Durante varias semanas después de la cirugía, se debe evitar hacer esfuerzos o levantar objetos pesados.

La intervención quirúrgica resulta «necesaria» por la agravación de los síntomas presentados por el sumo pontífice, indicó su equipo médico, y requerirá «varios días» de hospitalización, precisó el director del servicio de prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni.

Según informaron del Vaticano, Francisco venía sufriendo «fuertes dolores». El martes fue llevado a la clínica Gemelli «para controles». Estuvo alrededor de una hora y media. Allí se habría definido la necesidad urgente de una intervención.

El Papa ya había sido advertido que debía operarse por este mismo problema, pero el pontífice se había nego. También se había negado a operarse de la artrosis de rodilla, que le impide caminar normalmente, alegando los problemas que tuvo con la anestesia cuando fue operado en 2021.