Altos representantes de Estados Unidos y China se reunieron en Estocolmo para tratar posibles prórrogas y ajustes en los niveles de tarifas vigentes. Durante dos días, las delegaciones encabezadas por Scott Bessent y He Lifeng buscan consolidar una reciente distensión comercial, allanando el camino para una eventual reunión entre Donald Trump y Xi Jinping. Las conversaciones constituyen la tercera serie de encuentros en 2025, convocadas tras alzas en aranceles y caídas en los mercados financieros. Actualmente, rige una pausa de 90 días en la aplicación de los aranceles, pero los niveles podrían superar el 100% sin una extensión del acuerdo. Los temas centrales incluyen el acceso de empresas estadounidenses al mercado chino y la reducción de la sobrecapacidad industrial. Además, se observa una oportunidad para atender cuestiones estructurales y colaborar para frenar los insumos químicos. El acuerdo comercial provisional entre Estados Unidos y la Unión Europea impone un arancel del 15% sobre la mayoría de bienes, evitando aumentos mayores que podrían haber repercutido en ambas economías. Las partes estipularon compras europeas adicionales de energía estadounidense por 750.000 millones de dólares en los próximos tres años, e inversiones por 600.000 millones de dólares en territorio estadounidense. El periodo de negociaciones transcurre en una coyuntura en la que otros socios comerciales enfrentan la perspectiva de nuevos aranceles de entre 10% y 50%.
Negociaciones comerciales entre EE. UU. y China en Estocolmo: búsquedas de reducir tensiones arancelarias
