Desde Jerusalén, Israel mantiene una ofensiva aérea contra Irán, mientras aguarda la reacción final del ayatollah Khamenei. La posición de Khamenei ante los bombardeos de Estados Unidos a instalaciones nucleares en Fordow, Natanz e Isfahan sugiere una reluctante postura bélica. Antes del ataque directo a Irán, Trump abrió un backchannel con el presidente de Turquía para cerrar un acuerdo diplomático de último minuto, el cual no prosperó. En este contexto, es poco probable que Khamenei se incline por la vía diplomática para resolver el enfrentamiento de Irán contra Estados Unidos e Israel. En Jerusalén, se baraja la posibilidad de que Khamenei ordene un ataque terrorista contra las bases militares de Estados Unidos en Siria o Irak, lo que desencadenaría un conflicto sin antecedentes en Medio Oriente. Si Khamenei avanza contra estas bases militares, la réplica de Trump causaría un efecto dominó en la región. De todas maneras, Israel ya está en alerta máxima ante posibles ataques terroristas. Iran aún tiene la capacidad militar de Hamas y Hezbollah, que por ahora se han mantenido al margen. Al margen de los posibles ataques propios a bases militares o blancos civiles por medio de Hezbollah o Hamas, Irán puede causar un daño económico a Estados Unidos si cierra el estrecho de Ormuz, lo que podría desencadenar una crisis económica global. El objetivo de la ofensiva aérea de Israel contra Irán apuntaba a destruir su proyecto nuclear, y ahora se busca un escenario diplomático para bajar las tensiones geopolíticas. Trump apuesta a Vladimir Putin para contener a Khamenei y forzar un consenso bilateral que aplaque una escalada bélica en la región. Rusia e Irán son aliados, y Putin podría desempeñar un papel clave en este contexto. En caso contrario, si Khamenei rechaza esa posibilidad, Estados Unidos volvería a atacar a Irán con el respaldo de países influyentes de la Liga Árabe. #Israel #Irán #Khamenei
Israel persiste en ofensiva aérea contra Irán y aguarda reacción del ayatollah Khamenei
