Benjamin Netanyahu anunció que Israel acabó con la instalación nuclear más importante de Natanz, utilizada para enriquecimiento de uranio, en un ataque que dejó importantes daños. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron que se destruyó la infraestructura vital del sitio, con el objetivo de frenar el avance del proyecto nuclear del régimen iraní. La instalación de Natanz, estratégicamente situada cerca de Teherán, fue objeto de ataques aéreos que generaron preocupación acerca de la potencial contaminación y diseminación de material tóxico.
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ENRIQUECIMIENTO DE URANIO
Natanz alberga plantas de enriquecimiento de uranio, con capacidad para albergar 50.000 centrifugadoras, pero actualmente operan alrededor de 11.000, refinando uranio a una pureza del 5%. También cuenta con otras plantas subterráneas, generando debates sobre los potenciales daños de los ataques aéreos, como la contaminación y la diseminación de material tóxico. En respuesta a esta ofensiva, Irán lanzó una importante respuesta contra Israel, que incluyó decenas de misiles. El régimen persa activó una respuesta militar contra Israel, y este respondió con un ataque aéreo que incluyó objetivos militares y nucleares. El jefe de inteligencia de Irán fue mencionado por Netanyahu como uno de los blancos, en medio de intensos ataques cruzados entre ambas naciones.