El conflicto entre el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales y el Ejecutivo Municipal entra en su quinta semana sin visos de solución. Los trabajadores, nucleados en el sindicato, continúan con la huelga por tiempo indeterminado y mantienen el acampe frente a la sede municipal, en protesta contra la decisión del Ejecutivo de descontar los días de paro.
En medio de esta prolongada medida de fuerza, la concejala Gilda Godoy ha manifestado su preocupación por la situación, calificándola como una «competencia de resistencia» entre ambas partes, que no solo afecta a los trabajadores sino también a los ciudadanos que dependen de los servicios municipales. Según Godoy, el municipio cuenta con los recursos financieros necesarios para resolver el conflicto, pero la actitud de regateo de ambas partes ha obstaculizado cualquier avance en las negociaciones.
«La situación es una vergüenza y una muestra de irresponsabilidad», afirmó la concejala, criticando duramente la falta de acuerdo entre el sindicato y el Ejecutivo. Para Godoy, la solución pasa por el diálogo y la disposición de ambas partes a ceder en sus posturas para llegar a un entendimiento que permita el fin de la huelga y el regreso a la normalidad en la prestación de servicios municipales.
Mientras tanto, los trabajadores del sindicato continúan firmes en su postura, esperando una respuesta favorable del Ejecutivo que ponga fin a los descuentos por los días de paro y ofrezca una solución al conflicto laboral que ya lleva más de un mes afectando a la comunidad.
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