La idea era darle una sorpresa a la familia el domingo de Pascua. La nena caminaba con un disfraz de conejo y los huevos de chocolate en la mano y su mamá, unos pasos más atrás, la filmaba con su celular. Entonces aparecieron delante de la cámara dos motochorros y la grabación se interrumpió con un grito de terror.
Uno de los delincuentes, armado, se bajó para asaltarlas. «Dame todo que te mato«, recordó Lorena, la mamá de la nena atacada, que le dijo. «Me apuntaba todo el tiempo a mí», reafirmó.
El hecho ocurrió a plena luz del día en un barrio céntrico de la provincia de Tucumán. «Lo primero que hice fue gritar y correr», contó la mujer. El pedido de auxilio iba dirigido a su marido, que ya había llegado a la casa de sus padres, a unos 30 metros de donde ellas estaban.
Toda la secuencia fue tan violenta como precipitada. «Podrían haberle pasado por encima a mi hija para sacarme el celular», aseguró en referencia a la actitud de los ladrones. Con el paso de las horas agradece que salieron ilesas del incidente pero reconoce: «No vivís tranquilo nunca más«.
Los motochorros no pudieron concretar el robo y escaparon, pero sus caras quedaron registradas en el video que grabó la mamá. Todavía ninguno fue detenido.
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