#PapaFrancisco #SedeVacante #Cónclave
El papa Francisco falleció tras haber sido hospitalizado por una neumonía bilateral, enfermedad por la cual había sido dado de alta el pasado 28 de marzo. Su última aparición pública se dio durante la tradicional bendición «Urbi et Orbi» del Domingo de Pascua en la Plaza de San Pedro, donde se le vio visiblemente debilitado.
Con su fallecimiento, se activa oficialmente el protocolo de la Sede Vacante, el proceso que rige el funcionamiento de la Iglesia Católica en ausencia de un pontífice. Durante este período, se suspenden todas las funciones del Papa y la administración de la Iglesia queda en manos del Colegio de Cardenales.
¿Qué implica la Sede Vacante?
El término «Sede Vacante» hace referencia al período que transcurre entre la muerte (o renuncia) de un Papa y la elección de su sucesor. Durante este lapso, el cardenal camarlengo —actualmente el cardenal Kevin Farrell— asume la responsabilidad de gestionar los asuntos cotidianos del Vaticano, aunque con facultades limitadas.
El camarlengo certifica oficialmente la muerte del pontífice, sella sus aposentos, convoca al Colegio Cardenalicio y organiza los preparativos para el funeral y el cónclave.
Cuándo será el cónclave
Según las normas establecidas por la constitución apostólica Universi Dominici Gregis, el cónclave para elegir al nuevo Papa debe comenzar entre 15 y 20 días después del fallecimiento. Este período permite el arribo de todos los cardenales electores al Vaticano y la realización de los actos litúrgicos previos, incluyendo el funeral del pontífice fallecido, que suele durar nueve días.
El cónclave se desarrollará en la Capilla Sixtina y reunirá a los cardenales menores de 80 años provenientes de distintas partes del mundo. El nuevo Papa será elegido por mayoría de dos tercios y, una vez aceptado el cargo, asumirá inmediatamente como Sumo Pontífice de la Iglesia Católica.
El legado del papa Francisco
Jorge Mario Bergoglio, conocido como el papa Francisco, fue el primer pontífice latinoamericano y el primero jesuita en ocupar el trono de Pedro. Elegido en 2013 tras la renuncia de Benedicto XVI, su papado se caracterizó por una fuerte orientación hacia la justicia social, el diálogo interreligioso y una reforma estructural de la Curia romana.
Francisco también fue una figura clave en debates contemporáneos dentro de la Iglesia, como la acogida a los migrantes, el cuidado del medio ambiente y una postura más inclusiva hacia sectores históricamente marginados.
Su estilo pastoral y su cercanía con la gente marcaron una diferencia respecto a sus predecesores y dejaron una huella profunda en millones de fieles alrededor del mundo.

Debe estar conectado para enviar un comentario.