Horas antes de su pelea, Daniel Dubois sorprendió a propios y extraños con una fiesta multitudinaria en su mansión familiar en Essex. Según The Times, unas 70 personas, incluyendo desconocidos, asistieron a la celebración. Videos compartidos en redes sociales mostraron a Dubois entre el gentío, sonriendo y posando para fotografías, generando repercusiones en medios ingleses. El caótico evento retrasó su llegada al camarín en el Estadio Wembley, y su padre, Stanley, causó dificultades para el acceso al evento. La deriva de la fiesta alcanzó su punto crítico con declaraciones de Stanley sobre no subir al ring si no permitían entrar a su grupo, y la reserva de 50 sillas en ringside para los invitados de la familia Dubois. Este contraste fué notorio frente a la disciplina mostrada por Oleksandr Usyk. La elección de organizar la reunión generó sorpresa y críticas en el mundo del boxeo, llegando a afirmar que la inusual previa afectó su rendimiento en la derrota por KO ante Usyk.
Escándalo: fiesta multitudinaria de Daniel Dubois antes de su derrota por KO
