La Cámara de Diputados, en la conmemoración por el día Internacional del Orgullo, llevó adelante un conversatorio con el tópico de “Por el orgullo de Ser. Historia de conquistas” como eje articulador. Allí, se realizó un racconto histórico de la lucha por la igualdad y la equidad para con el colectivo LGBTIQ+ y sus expresiones donde parciparon Marcelo Suntheim, vicepresidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA), el licendiado Alejandro Gutierrez Saracho (UNCa) y la presidenta de la Cámara baja, Cecilia Guerrero.
Precisamente, Suntheim fue el encargado de iniciar la charla realizando un repaso histórico desde lo sucedido un 28 de 1969 con la redada policial en el pub Stonewall Inn que implicó a los integrantes del colectivo LGBT se revelaran contra la opresión que sufrían. Además, explicó que en Argentina el activismo comenzó hacia fines de la década de los ´60. “En un periodo de gran convulsión social. defendimos la marcha del orgullo, que es más revolucionario y fuerte que la dignidad, como idea contra la vergüenza y el estigma” sintetizó lo que fue el inicio de la lucha. El vicepresidente de la CHA, señaló que si bien hubo avances en lo que hace a reconocimientos de derechos hasta la actualidad “aún quedan por conquistar todos los demás derechos y reparaciones que la sociedad y el Estado le deben al colectivo travesti-trans; es necesario trabajar para aprobar leyes de protección dentro de una nueva ley antidiscriminación”.
Por su parte, Saracho se enfocó en lo sucedido en Catamarca en la constitución de espacios colectivos desde los cuales se intentaba tener una incidencia pública. En este sentido, rememoró que en 1976, el por entonces nombrado Jefe de Policía “anunciaba que tenía el firme propósito de erradicar tres flagelos, la corrupción, la inmoralidad y la subversión, y en una razzia dio cuenta de ello cuando él relató cuál había sido el procedimiento contra las conductas y los espacios sexuales disidentes”. También recordó que en el 2006 Carlos Figari, Elsa Ponce y Antonio Torrente comenzaron a visibilizar con las primeras denuncias públicas los crímenes de odio y pedir por su esclarecimiento. Además, comentó que en el 2007 se organizó la primera marcha del orgullo en Catamarca y comparó que la experiencia local con otras grandes urbes del país como Buenos Aires, Córdoba o Santa Fe permiten hablar sobre el concepto de microvitalidad en Catamarca “donde dos o tres sujetas pueden hacer como una pequeña revolución”.
Luego, la titular de Diputados contempló que “la lucha del activismo LGBTIQ+ “está íntimamente vinculada con la lucha por la libertad, la libertad de ser, de sentir, de expresar lo que se es y por un camino que procura el reconocimiento y el respeto de los derechos humanos de las personas, una lucha donde debemos comprometernos todos, todas y todes”. Guerrero contrastó la recientemente aprobada ley de cupo laboral trans con una iniciativa local, la cual “no tuvimos la suerte de que sea considerada y este año lo volvimos a presentar para que sea ley en Catamarca”. Además, destacó el proyecto con media sanción de Diputados impulsado por Adriana Diaz que “procura que se haga realidad en las escuelas que los niños niñas y adolescentes sean tratados nombrados y reconocidos con su nombre de pila de su identidad autopercibida”. “Tenemos pendientes, con todos los avances normativos, la profundización y la efectiva implementación de la Educación Sexual Integral (ESI) en las escuelas, principalmente en las públicas de gestión privada y de gestión privada confesional, que es donde más resistencia hay” distinguió sobre el cierre.
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