El ladrón de 15 años que fue detenido 66 veces

Un video viral de un robo piraña en el túnel de Anchorena, en Once, expuso la situación que sufren a diario los vecinos y quienes suelen transitar por allí, como también por el paso bajo nivel de Jean Jaures. Por ese caso, grabado por una cámara a bordo de un auto, fueron detenidos dos adolescentes de 15 años, uno con un historial de 66 entradas a comisarías. Están acusados de integrar el grupo de cuatro ladrones que intentaron robar a un delivery en moto cuando circulaba por el paso bajo nivel.

A los sospechosos los detuvieron el domingo por el robo de un celular a un hombre en Sarmiento al 2700. Luego de una serie de peritajes a las imágenes del video y las cámaras de seguridad de la zona vieron que eran los mismos que los del ataque al delivery.

Los dos ya son conocidos en el barrio. Uno de ellos tiene 66 entradas a la comisaría, 65 de ellas entre 2020 y 2024 y la gran mayoría por robos y hurtos, según dijeron fuentes policiales a Clarín. La última, antes de la del domingo, había sido el 5 de abril. El otro menor tiene cuatro antecedentes. Pero al ser inimputables, cada vez que son detenidos, la Justicia debe liberarlos.

«Todo el mundo sabe que acá roban a lo pavote»

Los robos en esta zona de Balvanera son frecuentes. Horacio tiene 80 años y es jubilado. Todos los días sale a caminar. Es una rutina, pero cambia el recorrido según el horario: si es de día, puede pasar por Mitre; cuando anochece, prefiere la avenida Rivadavia. “De noche ni loco paso por Mitre o Sarmiento. Todo el mundo sabe que acá roban a lo pavote, y yo no me voy a arriesgar”, dice a Clarín, y abre sus brazos, como buscando alguna respuesta. “Hace más de 40 años que estoy por la zona, y todos los días se está un poco peor”.

Miriam, Pablo y Andrés trabajan en la Dirección General de Estadística y Censo del Gobierno de la Ciudad, cuyo edificio está en la calle Perón casi esquina Anchorena. Miran un móvil de TV que está estacionado en la esquina. “Ahora, como vino la televisión, hay policías dando vueltas, pero luego no se los ve”, se quejan.

El principal problema que tienen ellos refiere a los horarios de entrada y de salida: cuando llega el invierno, entran al trabajo temprano en la mañana y salen a la tarde, pasadas las 18: casi siempre es de noche a esas horas. «Ni las trabajadoras nocturnas quedan por la noche», agregan.

Fuente: Clarín