La reciente elección del norteamericano Robert Prevost como sucesor del Papa Francisco, quien será León XIV, ha generado un inesperado conflicto en la agenda política de Ciudad de Buenos Aires. El presidente Javier Milei se vería imposibilitado de ejercer su voto en las elecciones porteñas al coincidir la asunción del Sumo Pontífice con la jornada electoral. Este hecho ha desencadenado una reorganización de las actividades políticas en el ámbito nacional y local.
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**Ajustes de agenda**
Ante la designación papal que impactó en la discusión entre oficialismo y PRO por el proyecto de Ficha Limpia rechazado en el Senado, se ha desencadenado un reacomodamiento de cronogramas. El secretario de Culto de la Cancillería, Nahuel Sotelo, se reunió con el asesor presidencial Santiago Caputo para abordar la invitación del Vaticano al Gobierno para la ceremonia de asunción de León XIV.
**Un presidente ausente en las elecciones**
Se estima que Milei representará a Argentina en la ceremonia religiosa, posiblemente programada para coincidir con las elecciones. Esto implicaría que el mandatario no estaría presente en el país al momento de la votación. La campaña se intensifica en Ciudad de Buenos Aires con el enfrentamiento entre La Libertad Avanza, liderada por Adorni, y el PRO de Silvia Lospennato, lo cual podría influir en futuros acuerdos políticos.
**Cierre de campaña en marcha**
A pesar de estos acontecimientos, tanto las fuerzas oficiales como La Libertad Avanza continúan con su agenda electoral. Milei y Adorni participaron en programas mediáticos y eventos partidarios, manteniendo la campaña en curso. Se espera que el cierre de campaña oficialista se realice en Palermo, con la presencia de la legisladora Pilar Ramírez, en un acto que podría contar con la asistencia del Presidente antes de su partida a Roma.
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