La unión del circuito femenino al masculino, junto a la necesidad de aumentar premios y recaudación, ha llevado a una sobreposición de torneos y a la modificación del calendario. La ATP y WTA deben comprar semanas del calendario para sus torneos, pero la sobreposición de eventos ha llevado a finales de torneos a mitad de semana. Esto se debe a la falta de semanas intermedias en un calendario ya apretado y ocupado. La carrera de superposición de torneos inicia en América del Norte, con competencias que se extienden a 12 días, sin contar con las semanas intermedias necesarias. Esta situación ha llevado a la eliminación de torneos y a la reubicación de otros, generando un apretado y agitado calendario para los tenistas. La comercialización de los torneos parece imponerse sobre el desarrollo del tenis regional y las posibilidades de los jugadores, quienes ven afectada su agenda.
El apretado calendario tenístico: finales de torneos a mitad de semana
