El 24 de julio del año 2012, vestida de negro pero con mucho brillo, Cristina Kirchner inauguró el Fórum, un Centro de Convenciones y Exposiciones erigido en la vieja estación del Ferrocarril Mitre. A su lado estaba el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, un dirigente de origen radical y vínculos profundos con el kirchnerismo.
Ella volverá esta noche a ese mismo lugar, para presentar su libro bestseller «Sinceramente». Será un virtual inicio de campaña en el Norte Argentino, donde Zamora y su esposa, Claudia Ledesma Abdala, estarán de nuevo en primera fila.
Excepto por sus viajes a Santa Cruz y a Cuba, a donde ha ido a acompañar a su hija Florencia que permanece en la isla en tratamiento médico, la ex presidente no suele hacer giras provinciales desde que abandonó la Casa Rosada. La última vez que visitó el norte fue en 2017, al participar del Congreso Nacional de Mujeres Justicialistas, cuando perdió la elección bonaerense como candidata a senadora nacional.
Ahora es precandidata a vicepresidenta de la Nación, y tanto quienes están cerca suyo como Felipe Solá, le han recordado el peso electoral del noroeste y noreste, ratificado este fin de semana con la victoria de Juan Manzur en Tucumán.
Aunque mañana no protagonizará un acto con estilo proselitista, ya que se replicará el formato Feria del Libro, CFK hará un desembarco electoral. De las 2500 sillas colocadas en el Fórum, 300 serán para los máximos referentes de la política local, artistas, representantes de la cultura y de organismos de derechos humanos, como ocurrió en La Rural durante la Feria del Libro.
«Volver a enamorar» aconsejó Solá al proponer que la ex presidente viajara por el país y que lo mismo haga Alberto Fernández, tras el reposo médico que le aconsejaron tras sufrir una inflamación de pleura que lo sacó de la campaña durante 72 horas.
Por qué Santiago
La elección de Santiago del Estero como primera escala proselitista tiene su lógica política: el caudal de votos que el kirchnerismo siempre logró por el apoyo del matrimonio Zamora, pese a su pertenencia a la Unión Cívica Radical. En 2011, Cristina obtuvo allí un 82% de los votos para la reelección, su mayor porcentaje en todo el país.
Sobre esa base electoral, el kirchnerismo apunta a mantener sus votos propios en todo el norte (Santiago y Tucumán), así como en Chaco, Formosa, Catamarca y La Rioja. En esa región de la Argentina, con la excepción de Jujuy y Salta, CFK es un número puesto.
Asimismo, el viaje también tiene una cuota de simbolismo. Frente a las críticas por el pasado y la «década perdida» que le atribuyen sus detractores, Cristina Fernández busca cobijarse allí donde su gestión fue efectiva. El Fórum es parte de ese simbolismo: lo califican como un centro de nivel internacional donde se presentaron grandes figuras y uno de los mejores sitios para espectáculos y actividades culturales en las provincias.
El arribo de la ex presidenta está previsto para las 20 (en un vuelo de línea), y en agenda tiene una cena de bienvenida con los Zamora. Se alojará en el hotel Carlos V y los dirigentes locales, con apoyo de algunos colaboradores del Instituto Patria, tienen organizada una caravana desde el aeropuerto Ángel Aragonés hasta el centro de la Ciudad.
«Es una visita de Estado», aseguran en Santiago del Estero. No es para menos: Cristina fue clave para que la familia Zamora se consolide al frente de una provincia que se inclinará -definitivamente- a la candidatura que encabeza Alberto Fernández.
Debe estar conectado para enviar un comentario.