Condenan a exrector de la UNT y funcionarios por desvío de fondos

La Justicia federal condenó al exrector de la Universidad Nacional de Tucumán, Juan Alberto Cerisola, a tres años y seis meses de prisión, junto con inhabilitación especial y perpetua para ejercer cargos públicos. Esta condena se da en el marco de la causa que investigó el destino de los fondos recibidos por la casa de altos estudios de la empresa minera interestadual YMAD. No obstante, la sentencia no tendrá efecto inmediato, ya que Cerisola no irá a prisión hasta que quede firme.

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INVESTIGACIÓN EN CURSO

Junto con el exrector, fueron condenados los exfuncionarios universitarios Olga Cudmani -a tres años y dos meses de prisión e inhabilitación especial y perpetua- y Osvaldo Venturino -dos años de prisión en suspenso e inhabilitación especial-. La sentencia también ordena que Cerisola y Cudmani paguen más de 39 millones de pesos a la universidad, mientras que Venturino y Cudmani deberán pagar más de 700 mil pesos.

Por ley, la UNT debía destinar el 40% de las utilidades a la construcción de una ciudad universitaria, pero en diciembre de 2007 el directorio de YMAD declaró concluida esa obra. En 2008, Cerisola firmó el acta que oficializó la medida, destinando los fondos a otras obras, lo que abrió la puerta a un esquema especial de contrataciones.