El Calamar dio el golpe en el Monumental tras empatar 1-1 y ganar 4-2 desde los doce pasos. Mastantuono forzó el empate con polémica, pero Cozzani fue héroe en la definición.
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Un batacazo que sacude el torneo
En una noche cargada de tensión, polémicas y drama hasta el último minuto, Platense hizo historia al eliminar a River Plate en el mismísimo Estadio Monumental, tras empatar 1-1 en los 90 minutos y luego imponerse 4-2 en la tanda de penales. El resultado mete al Calamar entre los cuatro mejores del Torneo Apertura 2025, donde enfrentará a San Lorenzo en busca de la gran final.
Taborda sorprendió y Mastantuono estiró el drama
El equipo de Orsi-Gómez se puso en ventaja a los 28 minutos del primer tiempo gracias a Vicente Taborda, el joven atacante surgido de Boca Juniors, que definió con clase ante Franco Armani. A partir de allí, el Calamar jugó un partido inteligente, ordenado y sin arriesgar en defensa.
River, con un rendimiento irregular, reaccionó sobre el final y encontró el empate en el minuto 101, a través de un penal cobrado por Yael Falcón Pérez por una discutida falta sobre Miguel Borja. Franco Mastantuono, la joya del Millonario, se hizo cargo de la ejecución y marcó con un zurdazo certero, llevando la definición a los penales.
Cozzani fue héroe y River se despidió
En la tanda desde los doce pasos, Platense fue letal. Anotaron Vázquez, Mainero, Zapiola y Schor, mientras que Saborido falló. Por el lado de River, marcaron Mastantuono y Borja, pero Kevin Castaño falló y Sebastián Driussi encontró una tremenda atajada de Juan Pablo Cozzani, que se transformó en figura.
El Monumental quedó en silencio ante la eliminación de un River que volvió a mostrar falta de contundencia y juego colectivo, pese al talento individual de algunos de sus jóvenes.
San Lorenzo será el próximo rival del Calamar
Con este resultado, Platense avanza a la semifinal, donde se medirá con San Lorenzo en el Estadio Pedro Bidegain. En la otra llave, Independiente recibirá a Huracán en el Libertadores de América, en una fase final cargada de clásicos y sorpresas.
El equipo de Vicente López va por todo en un torneo donde el peso de los grandes ya no es garantía y donde el orden, el esfuerzo y la convicción están marcando la diferencia.