Los repetidos ataques de Israel contra Irán han causado graves daños a la instalación nuclear de Natanz, crucial para el enriquecimiento de uranio. Imágenes compartidas en redes muestran el lugar afectado por los impactos israelíes, coincidiendo con densas columnas de humo negro. La operación israelí apunta a detener el avance del programa nuclear iraní, afectando la infraestructura vital para el funcionamiento continuo del sitio. Natanz, ubicada cerca de la ciudad santa chiíta de Qom, es una de las dos principales instalaciones nucleares subterráneas de Irán. La planta subterránea de enriquecimiento de combustible (FEP) alberga 14.000 centrifugadoras, refinando uranio a una pureza del 5%. Existe preocupación por posibles daños, contaminación y diseminación del material tóxico, ya que Natanz cuenta con tres plantas subterráneas. En respuesta, el régimen iraní lanzó una importante andanada de misiles contra Israel, activando las alarmas de emergencia y llevando al sistema de defensa de la Cúpula de Hierro a interceptar la mayoría de los proyectiles. Sin embargo, algunos alcanzaron zonas civiles de Tel Aviv, generando una advertencia por parte del gobierno de Netanyahu. La escalada de tensiones incluyó declaraciones de un funcionario israelí sobre un posible próximo paso en el conflicto.
Ataques israelíes dañan instalación nuclear de Natanz, estratégica para enriquecimiento de uranio en Irán
