En una respuesta a las ofensivas previas, el régimen de Irán lanzó un nuevo ataque el sábado por la noche, dirigido al norte de Israel, específicamente en la zona de Haifa. La ofensiva dejó al menos tres muertos y 14 heridos, ocasionados por el derrumbe de un edificio de departamentos de cuatro plantas.
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ATENCIÓN EN HAIFA
Una vez activadas las alarmas de emergencia, las Fuerzas de Defensa confirmaron la detección de las amenazas enemigas y urgieron a los ciudadanos a buscar refugio. El sistema de defensa antiaéreo ya estaba operativo y listo para repeler los misiles.
Los proyectiles impactaron los cielos israelíes, siendo interceptados por la Cúpula de Hierro, aunque algunos lograron impactar zonas cercanas.
Tras el ataque, los servicios de emergencia se desplazaron al edificio derrumbado para asistir a las víctimas.
REPRESALIAS ISRAELÍES
En respuesta, la Fuerza Aérea israelí continuó operando sobre Teherán, alcanzando el Ministerio de Defensa y dos depósitos de combustible. Los ataques se extendieron a otros objetivos en Irán, incluyendo instalaciones militares y estratégicas. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió sobre futuros ataques a objetivos del régimen iraní. Por su parte, el ministro de Defensa de Israel aseguró que Teherán arderá como consecuencia de los ataques.